La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, ha contradicho la afirmación del presidente electo Donald Trump de que los dos líderes han acordado detener la migración a la frontera estadounidense. Tras una llamada telefónica con Sheinbaum, Trump afirmó en su plataforma de redes sociales, Truth Social, que México había acordado “detener la migración a través de México y hacia los Estados Unidos, cerrando efectivamente nuestra frontera sur”.
Sin embargo, Sheinbaum refutó rápidamente esta afirmación, enfatizando que la política de México prioriza abordar la migración al tiempo que defiende los derechos humanos. Aclaró en X (anteriormente Twitter): “La posición de México no es cerrar fronteras sino construir puentes entre gobiernos y pueblos”.
Los aranceles propuestos por Trump y el riesgo de una guerra comercial
El lunes, Trump intensificó las tensiones con los socios comerciales de Estados Unidos al anunciar planes para imponer aranceles radicales al asumir el cargo en enero. Estos incluyen un arancel del 25% a las importaciones de México y Canadá y un arancel del 10% a las importaciones de China. Trump declaró que los aranceles a México y Canadá se mantendrían hasta que cesara la inmigración ilegal y el tráfico de drogas hacia Estados Unidos. De manera similar, el arancel a China está vinculado a sus esfuerzos por reducir el contrabando de fentanilo.
La presidenta mexicana Sheinbaum respondió a las amenazas arancelarias de Trump prometiendo tomar represalias. “Si hay aranceles estadounidenses, México también los aumentará”, afirmó durante una conferencia de prensa. El ministro de Economía mexicano, Marcelo Ebrard, se hizo eco de su sentimiento, advirtiendo que tales aranceles serían contraproducentes. “Es un tiro en el pie”, comentó Ebrard, destacando la posible violación del acuerdo comercial T-MEC, negociado durante la primera presidencia de Trump en 2018.
Diferentes interpretaciones de la llamada Sheinbaum-Trump
Después de su conversación telefónica con Trump, Sheinbaum inicialmente describió su discusión como “excelente”, enfatizando los esfuerzos de México para gestionar la migración antes de que los migrantes lleguen a la frontera estadounidense. Sin embargo, Trump presentó una narrativa diferente, afirmando que México se había comprometido a detener de inmediato la migración a los EE. UU.
Sheinbaum más tarde aclaró su postura, reiterando el enfoque integral de México para gestionar la migración. “Respetamos los derechos humanos y trabajamos para abordar el fenómeno migratorio sin cerrar fronteras”, dijo.
Preocupaciones por las amenazas arancelarias de Trump
La posible guerra comercial desatada por los aranceles propuestos por Trump ha suscitado importantes preocupaciones. Si bien Trump sostiene que las medidas son necesarias para abordar la inmigración ilegal y el tráfico de drogas, los críticos advierten de graves repercusiones para las relaciones exteriores de Estados Unidos y la economía nacional.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, convocó una reunión de emergencia con los primeros ministros provinciales para discutir una respuesta unificada. Aunque la ministra de Finanzas, Chrystia Freeland, enfatizó el compromiso de Canadá con la solidaridad, surgieron divisiones. La primera ministra de Alberta, Danielle Smith, expresó dudas sobre la capacidad de Trudeau para negociar eficazmente con Trump, citando la animosidad personal entre los dos líderes.
Mientras tanto, los funcionarios chinos aún no han emitido una respuesta formal a los planes arancelarios de Trump. Sin embargo, un representante de la embajada china en Washington advirtió que “nadie ganará una guerra comercial”.
Migración y comercio: cuestiones clave para Estados Unidos y sus socios
La inmigración ilegal fue un tema central en las elecciones presidenciales estadounidenses de 2024, lo que ayudó a impulsar a Trump a la victoria. El presidente saliente Joe Biden había implementado medidas para frenar los cruces fronterizos ilegales durante la campaña, pero el tema sigue siendo un punto álgido en la política estadounidense.
Al mismo tiempo, las amenazas arancelarias de Trump han puesto en tensión las relaciones comerciales de Estados Unidos. Si bien el presidente electo ve estos aranceles como una herramienta de presión, las implicaciones más amplias podrían socavar las asociaciones de larga data y la estabilidad económica.
En resumen
Las narrativas divergentes entre Sheinbaum y Trump exponen uno de los defectos de personalidad de Trump: malinterpretar las palabras. Con la tensión en curso sobre la política migratoria y las relaciones internacionales y mientras Estados Unidos se prepara para una presidencia de Trump, los desafíos de equilibrar las prioridades nacionales con la cooperación global siguen siendo una prueba crítica para todas las partes involucradas.