Adidas ha puesto fin oficialmente a un capítulo tormentoso con Kanye West, anunciando el fin de todos los litigios que Adidas presentó contra el artista conocido comúnmente como Yeezy. El gigante alemán de la ropa deportiva rompió con Kanye en 2022, tras la presión del Comité Judío Americano por los controvertidos comentarios antisemitas del rapero. La ruptura dejó a Adidas con un importante stock de productos sin vender de Yeezy, cuyo valor se estima en unos 1.200 millones de euros.
El director ejecutivo de Adidas, Bjorn Gulden, confirmó por primera vez el martes que se había llegado a un acuerdo extrajudicial con Kanye, poniendo punto final a las batallas judiciales de las dos partes. Gulden dijo que no hubo intercambio financiero, como parte de la resolución, y subrayó que “el drama con West pertenece al pasado”. La empresa no ha revelado los detalles del acuerdo; sin embargo, ha dejado claro que todo el inventario restante de Yeezy se venderá a finales de 2024, lo que permitirá a Adidas finalmente pasar página en una de las asociaciones más destacadas.
Este acuerdo permite a Adidas y Kanye West seguir adelante con sus vidas, ya que la era que cierra no solo trajo consigo una considerable controversia y una reacción pública negativa, sino también una que trajo consigo pérdidas masivas. Esto también marca un cambio estratégico para Adidas, ya que la empresa de ropa deportiva concluye una de las colaboraciones más rentables, pero muy polémicas.