Mercedes-Benz ha informado de una caída del 64% en las ganancias de su principal negocio automovilístico en el tercer trimestre, por debajo de lo previsto por los expertos. El director financiero Harald Wilhelm dijo que la disminución se debió a una menor demanda en China, que relacionó con la desaceleración económica del país y los problemas inmobiliarios.
“Nuestros resultados del tercer trimestre no cumplieron con nuestros objetivos”, dijo Wilhelm, y explicó que la empresa planea intensificar los esfuerzos para reducir los costos. El director ejecutivo Ola Kaellenius señaló que los consumidores chinos están siendo cuidadosos con sus gastos debido a las preocupaciones económicas y los problemas inmobiliarios locales.
Las ganancias de la compañía también se vieron afectadas por los gastos relacionados con la actualización de sus modelos de automóviles, especialmente las nuevas versiones del SUV Clase G. Mercedes-Benz tuvo que ajustar su objetivo de margen de beneficio anual dos veces durante el tercer trimestre.
Mercedes-Benz es uno de los varios fabricantes de automóviles europeos que tienen problemas para mantener los beneficios a medida que el mercado de automóviles de lujo en China se enfría. Las conversaciones en curso entre Bruselas y Pekín sobre posibles aranceles a las importaciones de vehículos eléctricos chinos están haciendo que los desafíos financieros sean aún más difíciles.