La reorganización del gabinete anunciada recientemente por el presidente Bola Tinubu incluyó el nombramiento de Bianca Ojukwu como Ministra de Estado de Asuntos Exteriores. Este hecho ha generado debates, y muchos lo ven como un intento calculado de reparar las fisuras que han existido durante mucho tiempo entre Nigeria y el sudeste.
Katchi Ononuju, un analista político, ve este nombramiento como un gesto bien pensado de unidad. Dice que su opinión sobre el asunto es que se necesita hacer algo más que simplemente cambiar las caras en el gobierno para que se produzca la curación, cosas como la realización concreta de los resultados esperados en las demandas regionales.
La gran pregunta ahora es si la posición de Bianca influirá en el gobierno para que cambie su postura sobre el líder detenido del IPOB, Mazi Nnamdi Kanu. Si bien su posición le brinda una oportunidad para asuntos de asuntos exteriores, los expertos, incluido el abogado de Kanu, Aloy Ejimakor, dicen que puede usar esa posición para ayudar a poner de relieve cómo la detención afecta la imagen internacional de Nigeria.
El abogado Madubuachi Idam enfatizó que la verdadera unidad, por parte del gobierno, debe llevarse a cabo mediante un cambio real, y no simplemente una reorganización de los cargos. Los nigerianos estarán atentos para ver si la administración de Tinubu dará pasos concretos en la dirección del progreso inclusivo en todas las regiones.
En otras palabras, el nombramiento de Bianca es prometedor, pero requiere acción para que se haga realidad.
