Gran Bretaña ha suspendido su diálogo anual sobre seguridad con Georgia y ha pospuesto otras conversaciones sobre defensa por temor a un retroceso democrático, según informó el embajador británico en Tbilisi el martes.
Las relaciones entre Occidente y Georgia (uno de los estados más prooccidentales que han surgido de la ex Unión Soviética) han empeorado este año en vísperas de las elecciones parlamentarias del 26 de octubre.
La elección es vista ampliamente como una prueba para saber si Tbilisi regresa a la órbita de Rusia o abraza un futuro en la Unión Europea, a la que ha solicitado unirse.
El embajador Gareth Ward había dicho a la agencia de noticias InterPress:
“Yo esperaba que trabajáramos juntos para fortalecer la resiliencia de Georgia y nuestra prosperidad común, pero durante el año pasado el gobierno georgiano ha elegido un camino diferente”.
InterPress informó además que Archil Gorduladze, un legislador del partido gobernante Sueño Georgiano, había dicho que el momento de los comentarios de Ward representaba una “grave interferencia” en los asuntos internos de Georgia antes de las elecciones.
En mayo, los países occidentales criticaron a Georgia por una ley aprobada que requería que los grupos que reciben financiación del extranjero se registraran como agentes extranjeros, una medida que los opositores han dicho que se utilizará para luchar contra la disidencia.
Los opositores nacionales a la ley dicen que se parece a una legislación similar aprobada en Rusia en 2012 y ampliamente utilizada para silenciar a los críticos del Kremlin.
El proceso de adhesión de Georgia a la UE se suspendió poco después de que se aprobara la ley de agentes extranjeros y, a principios de este mes, el enviado de la UE a Tbilisi, Pawel Herczynski, declaró que Georgia podría incluso enfrentarse a sanciones si se aparta de la democracia.
Georgia y Rusia aún no tienen relaciones diplomáticas formales después de librar una corta guerra en 2008, pero los funcionarios rusos han señalado constantemente que quieren que Sueño Georgiano, que busca un cuarto mandato en el cargo, permanezca en el poder.