Hay veces en las que te despiertas y de repente no puedes levantar el brazo para alcanzar algo o incluso para cepillarte el pelo. Cada pequeño movimiento envía un dolor agudo y punzante a través del hombro. Esto es similar a la frustración que sienten las personas que sufren una afección llamada dedos y cara congelados. El hombro congelado es una afección que ocurre cuando la articulación del hombro se vuelve rígida y dolorosa al moverla. El hombro es una articulación esférica envuelta por una cubierta protectora llamada cápsula.
En el caso del hombro congelado, la cápsula se vuelve gruesa y tensa, lo que dificulta levantar el brazo. Además, el hombro congelado se presenta principalmente en personas de entre 40 y 60 años, y es más común en mujeres que en hombres. Independientemente, existen otras afecciones que hacen que el hombro congelado sea más probable. Estamos hablando de afecciones como la diabetes, los problemas de tiroides o incluso una lesión.
Foto de Harlie Raethel
Las etapas del hombro congelado
Etapa de congelamiento: en la primera etapa de esta afección, el hombro comienza a doler cada vez más. Se siente rígido y cada movimiento del hombro se vuelve doloroso. Esta etapa puede durar mucho tiempo, desde unas pocas semanas hasta varios meses. El dolor puede ser tan intenso que lo despierte por la noche.
Etapa de congelamiento: en este punto, el dolor comienza a disminuir, pero no termina allí. Esta vez, el hombro se vuelve súper rígido como si estuviera atascado. Es difícil mover el brazo, incluso si lo desea. Esto puede durar hasta un año.
Etapa de descongelamiento: esta es la etapa final en la que las cosas mejoran lentamente. El hombro se vuelve menos rígido y puede moverlo nuevamente. Sin embargo, lleva un tiempo, a veces más de un año. Pero con el tiempo, puede volver a usar el hombro con normalidad.
Síntomas del hombro congelado
Dolor profundo en el hombro
Rigidez en el hombro
Rango de movimiento limitado
Progresión gradual de los síntomas
Causas del hombro congelado
El hombro congelado no siempre tiene una causa clara, por lo que es difícil de entender. Debido a la naturaleza de esta afección, se sabe que el hombro congelado es idiopático.
Sin embargo, hay algunas cosas que parecen aumentar las probabilidades de sufrir un hombro congelado. En primer lugar, una lesión o cirugía. Si se lastima el hombro, se rompe un hueso o se somete a una cirugía en esa zona, es posible que no pueda curar mucho su brazo mientras se cura. Esta falta de movimiento puede hacer que la cápsula se espese y se tense, lo que conduce a un hombro congelado.
En segundo lugar, ciertos problemas de salud como la diabetes, las enfermedades cardíacas o los trastornos de la tiroides aumentan la probabilidad de que las personas sufran hombros congelados. Por último, si no usa el hombro durante mucho tiempo, como después de usar un cabestrillo o básicamente evitar el movimiento porque tiene dolor, puede endurecerse el hombro. Cuanto menos muevas el hombro, peor se pone.
En resumen
Tener hombro congelado hace que sea muy difícil moverlo. Aunque parezca fácil cepillarse el pelo o alcanzar algo, se vuelve imposible hacerlo con esta afección. Los médicos no saben exactamente por qué sucede, pero las lesiones, no mover el hombro durante mucho tiempo o tener problemas de salud como diabetes o problemas de tiroides pueden hacer que sea más probable. Pasa por tres etapas: congelación, congelación y descongelación; y cada etapa puede durar meses o incluso años.