Agentes de la policía nigeriana atacaron a varios manifestantes en el Territorio de la Capital Federal, Abuja, que se habían sumado a la protesta #FearlessInOctober contra las penurias y la pobreza el martes por la mañana.
Se vio a estos agentes de policía disparando botes de gas lacrimógeno y municiones contra los manifestantes que habían organizado una manifestación pacífica contra las penurias de la administración del presidente Bola Tinubu.
Los vídeos publicados en Internet mostraban a los manifestantes corriendo en busca de seguridad en las zonas que ahora se cree que son los alrededores de Jabi y Utako del Territorio de la Capital Federal.
En consecuencia, en las fotos de las protestas que se vieron, los manifestantes llevaban pancartas que decían: “La mala gobernanza ha acabado con los sueños de los jóvenes nigerianos, acabemos con ella ahora”, “Ya basta – Revolución ya”
Cabe señalar que este hecho se produce después de que el camarada Omoyele Sowore, activista de derechos humanos y organizador del movimiento #RevolutionNow, instara a los nigerianos de todo el país a unirse a él en la protesta del 1 de octubre contra las penurias, las privaciones, el hambre, el desempleo, la inseguridad y la pobreza que la administración del presidente Tinubu había desatado sobre los nigerianos.
Sowore, que hizo el llamamiento a la manifestación en una publicación el lunes por la noche, había dicho que no podía permanecer en silencio o indiferente ante los sufrimientos y el empobrecimiento que atravesaba el pueblo nigeriano, y señaló que estaría en las calles de Nigeria para unirse a otros nigerianos en protesta por las penurias.
Según él, las protestas o las revueltas eran la única herramienta que tenía la gente común para expresar su oposición a las políticas antipopulares de su gobierno, y que era un derecho que está codificado en los genes de todos.
Por último, recordó a los nigerianos que había pasado cinco de los últimos seis años en prisión, detenido o confinados por el gobierno dirigido por el Congreso de Todos los Progresistas, bajo acusaciones exageradas de traición que se vieron obligados a retirar, aunque Sowore había prometido que no cedería hasta que “nuestras demandas punto por punto se cumplan”.