Varias compañías aéreas han suspendido sus vuelos a Haití después de que un avión de pasajeros procedente de Estados Unidos fuera alcanzado por disparos cuando intentaba aterrizar en Puerto Príncipe.
El avión, en particular el vuelo 951 de Spirit Airlines procedente de Fort Lauderdale (Florida), fue desviado a la vecina República Dominicana, donde aterrizó sin problemas en el aeropuerto de Santiago.
Un auxiliar de vuelo sufrió heridas leves, pero ningún pasajero resultó herido en el ataque. Este incidente será el segundo en tres semanas en un avión que sobrevuela la capital de Haití y se produjo poco después de que un nuevo primer ministro volviera a ejercer su cargo en el país asolado por la crisis, las bandas armadas y la violencia en aumento.
El primer ministro de Haití, Alix Didier Fils-Aimé, había declarado a la agencia de noticias AFP que su prioridad era “restaurar la seguridad”, a pesar de las “circunstancias difíciles” del país. También prometió poner toda su energía, sus habilidades y su “patriotismo al servicio de la causa nacional”.
El vuelo de Spirit Airlines tenía previsto aterrizar en el Aeropuerto Internacional Toussaint Louverture poco antes de las 12:00 (17:00 GMT) cuando fue atacado.
Un vídeo no verificado del incidente publicado en las redes sociales había revelado varios agujeros de bala en el interior del avión, donde normalmente se sentaba la tripulación durante el despegue y el aterrizaje.
Un comunicado emitido por Spirit Airlines decía que el daño era “consistente con disparos” que se había encontrado cuando se inspeccionó el avión en el aeropuerto de Santiago. “El avión fue puesto fuera de servicio”, dijo Spirit, añadiendo que también había suspendido los vuelos a Haití “a la espera de una evaluación adicional”.
Spirit es una aerolínea de bajo coste establecida en Florida que opera en todo Estados Unidos, el Caribe y América Latina.
Otras dos aerolíneas estadounidenses, American Airlines y JetBlue, también habían suspendido los vuelos a Haití al menos hasta el jueves.
En los últimos meses, la situación de seguridad se ha deteriorado drásticamente en Haití.
En octubre, miembros de una pandilla dispararon contra un helicóptero de la ONU, lo que provocó que algunas aerolíneas cancelaran temporalmente los vuelos a la nación caribeña.
Una misión policial respaldada por la ONU y dirigida por oficiales de Kenia comenzó en junio a intentar recuperar el control de manos de las pandillas, pero según parece, no se han logrado muchos avances.